10 Lugares a los que viajar antes de que desaparezcan
En este caso sí que puede ser ahora o nunca. Viajes que
no puedes dejar escapar porque si los dejas pasar tal vez sea ya
demasiado tarde. Existen muchos lugares en peligro en el mundo pero
desde Trivago han seleccionado estos con los que estamos bastante de
acuerdo y que a continuación os enumeramos.
Después os hablaremos de algún otro que tal vez se les haya pasado o que simplemente no cabía en la lista.
– Venecia (Italia): Una de las ciudades europeas más turísticas y un clásico sobre el que se nos viene advirtiendo desde hace mucho de que se va hundiendo poco a poco sobre la laguna sobre la que se fundó.
– Islas Maldivas: La nación con menos altitud del mundo. 1200 islas paradisíacas que se podrían sumergir en cualquier momento por el cambio climático o por un tsunami.
– Kilimanjaro: Más que la montaña tanzano-keniana en si, lo que preocupa son sus nieves perpetuas en la cima. Algunos dicen que no pasarán del 2030.
– Arrecife de Belice: Patrimonio de la Humanidad y uno de los ecosistemas con más biodiversidad del mundo afectado ya en demasía por huracanes, pesca masiva y contaminación.
– Nápoles (Italia): En las faldas del Vesubio, volcán que ya sepultó Pompeya y Herculano, vive bajo su constante amenaza.
– Glaciares de la Patagonia: Como el Perito Moreno argentino que se derriten al ritmo de 20 millones de toneladas al año merecen un visita urgente.
– Madagascar: La “Isla del Tesoro” hogar de especies endémicas y enorme riqueza natural. La tala de árboles, la caza furtiva y la contaminación atmosférica la ponen cada día en mayor peligro.
– Mar Muerto (Israel): Famoso por la ingravidez de sus aguas a 430 metros por debajo del nivel del mar y que sigue hundiéndose cada año. A este ritmo podría secarse en el 2050.
– Taj Mahal (India): El espectacular palacio se resiente cada año de la afluencia masiva de turistas, la contaminación y las malas reparaciones. La Unesco estudia cerrarlo por un tiempo.
– Las Vegas (Estados Unidos): La sequía amenaza a la ciudad de los casinos situada en el desierto de Mojave.
Podrían citarse también la Gran Barrera de Coral Australiana, la Cuenca del Congo, los Glaciares de los Alpes o sobre todo las Islas Galápagos, en Ecuador, un ecosistema único y protegido cada vez más afectado por el turismo.
Después os hablaremos de algún otro que tal vez se les haya pasado o que simplemente no cabía en la lista.
– Venecia (Italia): Una de las ciudades europeas más turísticas y un clásico sobre el que se nos viene advirtiendo desde hace mucho de que se va hundiendo poco a poco sobre la laguna sobre la que se fundó.
– Islas Maldivas: La nación con menos altitud del mundo. 1200 islas paradisíacas que se podrían sumergir en cualquier momento por el cambio climático o por un tsunami.
– Kilimanjaro: Más que la montaña tanzano-keniana en si, lo que preocupa son sus nieves perpetuas en la cima. Algunos dicen que no pasarán del 2030.
– Arrecife de Belice: Patrimonio de la Humanidad y uno de los ecosistemas con más biodiversidad del mundo afectado ya en demasía por huracanes, pesca masiva y contaminación.
– Nápoles (Italia): En las faldas del Vesubio, volcán que ya sepultó Pompeya y Herculano, vive bajo su constante amenaza.
– Glaciares de la Patagonia: Como el Perito Moreno argentino que se derriten al ritmo de 20 millones de toneladas al año merecen un visita urgente.
– Madagascar: La “Isla del Tesoro” hogar de especies endémicas y enorme riqueza natural. La tala de árboles, la caza furtiva y la contaminación atmosférica la ponen cada día en mayor peligro.
– Mar Muerto (Israel): Famoso por la ingravidez de sus aguas a 430 metros por debajo del nivel del mar y que sigue hundiéndose cada año. A este ritmo podría secarse en el 2050.
– Taj Mahal (India): El espectacular palacio se resiente cada año de la afluencia masiva de turistas, la contaminación y las malas reparaciones. La Unesco estudia cerrarlo por un tiempo.
– Las Vegas (Estados Unidos): La sequía amenaza a la ciudad de los casinos situada en el desierto de Mojave.
Podrían citarse también la Gran Barrera de Coral Australiana, la Cuenca del Congo, los Glaciares de los Alpes o sobre todo las Islas Galápagos, en Ecuador, un ecosistema único y protegido cada vez más afectado por el turismo.
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